En el último par de años, 'Zero Trust' ha ganado una tracción significativa en el ámbito de la seguridad cibernética como un medio para proteger las redes y aumentar la seguridad en todas las organizaciones. En parte, la creciente popularidad de este modelo de seguridad se puede atribuir al cambio a prácticas de trabajo híbridas que exigen un entorno de trabajo más seguro, ya sea dentro o fuera de las instalaciones.

A medida que las organizaciones de todas las industrias, incluido el sector del petróleo y el gas, comienzan a diseñar e implementar este concepto de seguridad, lo que es 'Zero Trust' en la práctica es motivo de cierta confusión. Además de las diversas definiciones superpuestas y, en ocasiones, contradictorias de confianza de 'Zero trust' , el uso excesivo recurrente del término con fines de marketing se suma a la confusión.

Este documento comunitario tiene como objetivo desmitificar 'Zero Trust'. En contraste con el modelo de seguridad basado en el perímetro que considera que todo lo que se encuentra dentro de la red corporativa es seguro y confiable, 'Zero Trust' asume que no se puede confiar inherentemente en ningún usuario o dispositivo.

Las amenazas pueden ser tanto externas como internas.

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